15 consejos para vencer el miedo a grabarte en vídeos

Grabar vídeos es una de las formas más poderosas de crear vínculo con tu audiencia y atraer nuevos clientes, especialmente en profesiones como el yoga, la terapia o la espiritualidad, donde la conexión con el/la profe o terapeuta es clave. Sin embargo, muchos profesionales en estos sectores se enfrentan a un gran obstáculo: el miedo a ponerse frente a la cámara.

Este artículo tienes consejos prácticos para superar ese miedo e ideas de contenido que puedes utilizar para empezar a grabar vídeos sin presión, y desde tu autenticidad.

En mis sesiones de consultoría y en Mentoría OM encuentro a muchas clientas que me dicen lo siguiente:

“cada vez que hago una publicación en la que salgo yo o hablo a cámara, noto la buena repercusión que tiene”

“Sé que es muy bueno pero me cuesta mucho”

En algunos casos confiesan que “les da cosa” hablar a cámara. En otros, dan excusas del tipo “es que no sé cómo hacer para que salga bien” en cuanto a luz, perspectiva, etc.”

Si éste también es tu caso, aquí te doy algunos consejos que te ayudarán a atreverte a hablar a cámara y conectar con tu audiencia.

Consejos prácticos para superar el miedo a la cámara:

1.- Empieza pequeño y practica en privado

No necesitas lanzarte directamente a grabar un vídeo profesional. Comienza grabando vídeos cortos solo para ti. Hazlo en un entorno cómodo, sin la intención de compartirlo. Esto te permitirá familiarizarte con la cámara y acostumbrarte a verte en pantalla sin la presión de hacerlo público.

El siguiente paso puede ser sustituir las notas de voz en Whatsapp por vídeos. Eso te dará soltura y te “amigará” con la cámara. Hazlo con personas muy cercanas. Les puedes explicar porqué lo haces y te sentirás cómoda para ello.

2.- Recuerda tu intención. Concéntrate en el valor, no en la perfección

Recuerda 2 cosas: una es que el foco no está en ti, sino en el mensaje que deseas transmitir y otra es que no te compares con otros profesionales cuyos vídeos son de gran calidad, quizás porque tienen un equipo profesional encargado de esa tarea.

Tu audiencia no espera perfección, sino autenticidad. Lo que importa es el valor que puedes ofrecer.

3.- Olvida la perfección y abraza la autenticidad

La gente conecta mejor con personas reales. No te preocupes por pequeños errores o tropiezos al hablar, son justamente esos momentos los que hacen que el contenido sea más cercano y auténtico. ¡La perfección está sobrevalorada! Tu audiencia (la que tienes y la que está por descubrirte) quiere conectar contigo, no con un robot. En la era de la Inteligencia Artificial y de la (falsa) perfección, la humanidad gana valor.

 4.- Habla a la cámara como si hablaras a alguien a quien conoces

Una buena manera de relajarse frente a la cámara es imaginar que estás hablando con tu mejor amigo o con uno de tus clientes favoritos. Esto hará que tu tono sea más natural y relajado.

También para esto sirve visualizar a tu cliente ideal. Sobre esto, puedes leer más aquí.

5.- Ponte guapa

Cuida tu aspecto y el lugar en el que te grabas. No hace falta que te maquilles y te vistas como para una boda, pero sí ponte algo que te haga sentir estupenda/o. Esto, además de hacerte sentir bien, influirá positivamente en la imagen de tu marca. (Sobre tu marca como profe de yoga, tienes un artículo aquí).

6.- Crea un entorno cómodo

Graba en un espacio donde te sientas seguro y relajado. Asegúrate de tener una buena iluminación (delante de una ventana es ideal) y un ambiente que te inspire paz. Este tipo de entorno, además del punto anterior, te ayudarán a sentirte más confiada y a que la grabación sea fluida.

7.- Ten un guión pero no lo memorices

Es bueno tener una idea clara de lo que vas a decir, pero evita memorizar todo palabra por palabra. Eso puede sonar poco natural. Mejor, ten una estructura básica y habla de manera espontánea.

8.- No tengas miedo de repetir

Repetir y descartar son dos conceptos amigos de toda grabación. Encuentra el equilibrio entre el perfeccionismo, las cosas bien hechas y el tiempo que tienes disponible. Cuando la misma persona que hace el vídeo, es la que lo edita, publica, redacta los textos y además, da las clases o prepara las sesiones.. no puedes excederte en un solo vídeo.

9.- El progreso es más importante que el miedo

Cada vez que te pones frente a la cámara, estás avanzando. Recuerda que el miedo es parte del proceso, pero no debe detenerte. En lugar de evitarlo, úsalo como energía para seguir adelante.

10.- Trabaja por bloques

Ya que tienes listo el set, la luz y el outfit, graba varios vídeos seguidos. Trabajar por bloques de tareas te ayudará a ahorrar tiempo y de una sola sentada ya tendrás preparados varios contenidos.

Otros consejos:

Si usas la cámara de selfie del teléfono, no mires a la pantalla sino al objetivo de la cámara. Eso dará la sensación al público, que les miras a los ojos.

No obstante, si eso te cuesta mucho, o te trabajas al hablar, pon el guión en la pantalla y lee el texto directamente a modo de “teleprompter”. Estás empezando, esto te ayudará! La soltura ya vendrá!

También te puede servir tomarte unos segundos antes de grabar, para hacer unas respiraciones y visualizarte grabándote y contenta.

Y después de grabarte, visionar el vídeo con los ojos de tu comunidad, no los tuyos, que a veces son demasiado críticos contigo misma.

Recompénsate después de cada grabación. Fomenta la satisfacción de haber dado un paso adelante hacia tus propósitos y hacia la persona que deseas ser.

Si estás familiarizada con la edición de videos y salir en cámara realmente es un gran obstáculo, graba tu voz y añádela, a modo de voz en off, a unas imágenes relacionadas con lo que estás explicando. Es un paso intermedio que te ayudará a irte mostrando poco a poco.

“Vale, me atrevo pero.. ¿qué grabo?

Aquí tienes 10 ideas de contenido para empezar a grabar pequeños vídeos para redes sociales, que te ayuden a que la audiencia conecte contigo:

Una vez que hayas trabajado en superar el miedo a la cámara, el siguiente paso es crear contenido que conecte con tu audiencia. Aquí te dejo 10 ideas de contenido inspiracional, perfectas para profesores de yoga, terapeutas y profesionales de la espiritualidad.

1.- Cuenta qué ofreces/vendes

¿Qué haces? ¿a qué perfil de personas te diriges? ¿en qué problema o anhelo les ayudas?

2.- Cuenta tu historia de transformación

Narra tu propia historia: ¿Cómo llegaste a convertirte en un profesor de yoga o terapeuta? ¿Qué desafíos enfrentaste y cómo los superaste? Esta conexión personal creará un lazo emocional con tu audiencia.

Sé breve y destaca sólo aquello que sea relevante y tenga relación con lo que vendes.

3.- Comparte una lección clave que aprendiste

Habla de una enseñanza o práctica específica que te haya impactado profundamente y cómo eso ha influido en tu trabajo actual. Explica cómo esta lección puede beneficiar a los demás.

4.- Responde a preguntas comunes

Haz un vídeo donde respondas a las preguntas que tus clientes o seguidores suelen hacer. Esto no solo posiciona tu experiencia, sino que también te permite interactuar directamente con tu audiencia.

5.- Explica un caso reciente

Cuenta qué problema tenía una de las últimas personas con las que has trabajado y cómo le ayudó acudir a ti. No se trata de hacer autobombo ni alimentar tu ego, sino de ayudar a que personas con una situación similar, entiendan que lo que tú ofreces les puede ayudar. Enfócate en el proceso y los resultados obtenidos, demostrando el valor de tu trabajo.

6.- Un día en tu vida profesional

Graba un vídeo mostrando cómo es un día en tu vida. Desde preparar una clase de yoga o una consulta terapéutica, hasta cómo gestionas tu bienestar personal. Esto ayuda a que los demás te conozcan mejor.

Esto puedes añadirlo por ejemplo en los Stories de Instagram y hacerlo espontáneamente en distintos momentos del día.

P.ej: “Aquí estoy abriendo la consulta” “Aquí estoy en la pausa de mediodía después de haber visto a alguien con …. Problema” “Aquí te enseño esto que utilizo con mis alumnos/pacientes” “mi tiempo personal”

7.- Aprendizaje de tus errores

Compartir tus errores y lo que has aprendido de ellos es una manera poderosa de mostrar tu humanidad y vulnerabilidad. Explica qué te salió mal pero sobre todo con el enfoque de cómo lo corregiste y qué aprendiste de ello.

8.- Anécdotas de tus inicios profesionales

Cuéntale a tu audiencia cómo fue tu primera clase, sesión o consulta. Este tipo de anécdotas muestran el crecimiento y progreso a lo largo de los años.

8bis.- También puedes reflexionar sobre cómo tu idea del éxito ha cambiado desde que comenzaste. Habla de cómo tus prioridades y perspectivas han evolucionado con el tiempo y cómo esto afecta tu enfoque hoy en día. Esto contribuye a posicionarte como alguien experimentado y experto.

9.- Tu visión, misión y valores

Habla de tu propósito detrás de lo que haces. ¿Cuál es tu visión a largo plazo y cómo esperas impactar la vida de los demás? Este tipo de contenido muestra tu compromiso y pasión. ¿Cuáles son los valores más importantes para ti en tu disciplina?

10.- Guía práctica en directo

Ofrece a tu audiencia una práctica sencilla que puedan seguir desde casa, como una meditación guiada, una serie de asanas o un ejercicio de respiración, journaling, coaching, etc. Este tipo de contenido proporciona valor inmediato y puede ser muy inspirador.

Ha llegado el momento

Grabar vídeos puede parecer intimidante al principio, pero es una de las herramientas más potentes para conectar con tu audiencia y compartir tu mensaje. Siguiendo estos consejos, podrás superar el miedo a la cámara y empezar a crear contenido auténtico y valioso para tus seguidores, en IG Stories, IG reels o Youtube.

Recuerda, cada paso que tomas te acerca más a tus metas. No se trata de ser perfecto, sino de ser auténtico y mostrarte tal como eres.

A la profesional que quieres ser, ¿le intimida ponerse ante una cámara?

Anímate a compartir tu sabiduría con el mundo!

Si quieres que te ayude con estos temas como por ejemplo cómo planificar tu contenido con estrategia, cómo mostrarte como marca o cómo desarrollar tu emprendimiento, escríbeme aquí y lo hablamos.

Con amor,